Hakuouki KW/EB: Ruta Heisuke

Hi!!
Tras un pequeño parón (me organizo mal con el tiempo libre del que dispongo, nada nuevo) vengo de nuevo con otra de esas entradas que nadie a pedido pero que, de nuevo, me da igual porque esta es mi adicción y aún no se ha encontrado cura (?)

De nuevo, toca Hakuouki. 

Como siempre, si tenéis dudas o curiosidad, aquí os dejo:

- La Reseña Global del Juego: Hakuouki Kyoto Winds y Edo Blossoms

 -La reseña global del anime: Hakuouki Anime (porque tiene anime!).

-La lista de juegos de Hakuouki: Juegos Hakuouki

-Ruta Hijikata!

-Ruta Souma!

Como ya supongo sabréis, esta es la segunda ruta que reseño, siendo la primera la de Hijikata. Esta vez volvemos a una de las rutas originales, la de Heisuke. 

En fin, lo que aquí veréis será una reseña/narración de su ruta junto con algunas de las CG's y en general, SPOILERS tanto de la ruta como de la trama del juego y del anime que viene a ser lo mismo. Avisados estáis. Intentaré eso sí ser más breve que la ve anterior~

RUTA HEISUKE: KYOTO WINDS

La ruta de Heisuke es una de las iniciales y por tanto desde el primer episodio empezamos a tener opciones de hablar e intimar con él.

Después de ser llevada a la fuerza al cuartel y tras debatir qué hacer con ella, la tropa encierra a nuestra prota en una habitación. Podemos intentar escapar o simplemente llamar a alguien para que escuche nuestras explicaciones, en cuyo caso Heisuke y compañía aparecen, así que les contamos que somos una Chica, cosa que los deja descolocados y hace que hagan una reunión de emergencia. Se descubre todo el percal de que la prota es hija de Kodo y deciden tenerla en el cuartel en régimen de semi-prisionera para que les ayude a buscar a su padre.
Como los primeros episodios son comunes a todas las rutas, vivimos lo de siempre, si bien hay ciertas opciones que nos llevan hasta nuestro querido Heisuke. Un día lo pillamos junto con Harada y Shinpachi intentando irse a Shimabara, y más tarde mientras limpiamos los pasillos, el muchacho viene a hacernos compañía. Hijikata lo abronca por pasarse el día sin hacer nada, así que Heisuke pasa a vivir como nosotros, osease, castigado en su habitación. Como nos da penita, vamos a llevarle comida, cosa que el chico agradece mucho life hack, a cualquier chico se le conquista con comida.

Pasan los días y llega el Asuntillo de la redada de Ikedaya, en la que decidimos acompañar a la tropa y así podemos seguir a Heisuke en sus aventuras y controlar que no se mate. El chaval tiene su primer encuentro con Amagiri y sale más o menos mal parado, así que para las próximas batallas no le dejan salir del cuartel. Poco después el muchacho se va a reclutar gente a Edo, y nos quedamos a dos velas hasta que regresa con Itou, Miki y mas peña que más adelante solo traerá problemas al Shinse.
La vida sigue su curso, de momento tranquilo; un buen día nieva y nuestro muchacho junto con Harada y Shinpachi deciden hacer una pelea de bolas de nieve que obviamente no acaba bien para Heisuke.

La prota soy Yo observando como la vida se carga mis planes.

En fin, llega el fatídico día en que Itou descubre que el Shinsengumi le oculta cosas, entre ellas a Sanan-san y a los rasetsus, por lo que decide abandonar el grupo y se lleva consigo a Heisuke y Saitou. Como nos da penita que se vayan, sobre todo nuestro niño, tenemos una pequeña charla en petit comité donde nos explica sus razones. Y con estas, se va.
Poco después aparece la princesa Sen para intentar sacarnos de allí, oferta que rechazamos cortésmente, aunque medio segundo después Kazama y sus amigos irrumpen en el cuartel haciendo que nos planteemos si hemos hecho bien. Como no tenemos temor de Dios, en medio del revuelo salimos fuera del cuartel, aunque nos intercepta Amagiri. En medio de las calles nocturnas de Kyoto la prota se pone a gritar pidiendo ayuda, y nuestro Heisuke que sinceramente no sé que hacía por la calle a esas horas   aparece de la nada, enfrentándose más o menos a Amagiri y liberándonos. Tras una rápida despedida, regresamos al cuartel, donde la vida sigue su aburrido curso, hasta que un buen día Yamazaki y Shimada nos piden que les ayudemos en una labor de espionaje. Nos visten de chica y nos dejan en un café para que cotilleemos lo que ahí oigamos, pero resulta que Heisuke estaba también allí. Primero nos habla sin reconocernos, aunque en seguida se da cuenta de que se trata de nuestra prota, pero prosigue con una conversación distendida e impersonal ya que, al haber abandonado el Shinsengumi, le está prohibido relacionarse con sus miembros. Nuestra prota fantasea con cómo habría sido la vida si de verdad se hubiesen conocido así, y durante su aparentemente inocente conversación, Heisuke nos repite esa primera frase amable que nos había dicho cuando lo conocimos "No tienes que ser tan formal conmigo. Al fin y al cabo, debemos de tener la misma edad, ¿no?" Si esto fuese un papel y no un blog, estaría todo manchado con mis lágrimas. Continúan con su chit-chat y Heisuke le da las gracias y se despide. Luego nos enteramos que toda esa misión de Espionaje no era más que Yamazaki e Hijikata moviendo los hilos para comprobar qué tal le iba a Heisuke y de paso probablemente, para que la muchacha dejase de suspirar por las esquinas.

Tiene lugar entonces el otro Fantástico Incidente Reseñable, Abura Koji, en el que decidimos unirnos a la comitiva que pretende interceptar a Heisuke y llevarlo de nuevo al Shinse. No obstante la situación está un poco tensa, porque Miki está algo escamado porque han matado a su hermano, Heisuke no sabe por dónde le vienen los golpes y encima de la nada aparecen Amagiri y Shiranui con unas tropas del Satsuma y aquello acaba siendo un festival de Todos Contra Todos. Nuestra prota obviamente no está en el lugar más adecuado y se encuentra con que es blanco de Todo El Mundo, cosa que hace que Heisuke se estrese un poco y nos salve el culo un par de veces. No obstante, por andar prestándonos atención recibe un Señor Golpe por parte de Amagiri, que lo deja catatónico y más en el otro barrio que en este. Ante la tesitura de dejarle morir o darle Ochimizu, ya os imagináis que pasa.
Lo siguiente que vemos es cómo, ya unos días después, la prota va a hacerle una visitilla al pobre Heisuke, que ahora es Rasetsu y no lo lleva muy bien. Heisuke se sincera y nos cuenta que no tiene familia propiamente dicha que lo eche de menos, dejó a su madre al irse con el Shinsengumi y su padre es un damyo que al tenerle como hijo bastardo, le manda dinero mensualmente para que no le dé problemas ni intente reclamar su feudo.
La guerra contra Satsuma estalla y llega hasta la puerta del cuartel, así que mientras todos luchan por proteger el territorio, Harada con cero disimulo le dice a Heisuke que se encargue de cuidarnos. Durante la refriega la parte Rasetsu del muchacho comienza a apoderarse de él y se le va momentáneamente la pinza, matando a diestro y siniestro. Cuando vuelve en sí tiene un conflicto moral muy grande, y para colmo de males aparece Sanan-san que le insta a que beba sangre y se deje llevar por sus instintos de Dichoso Rasetsu. Tras negarse en rotundo a caer en el asuntillo de la sangre, sufre una crisis y podemos ignorar olímpicamente todo su discurso y darle sangre me imagino su cara de "¿pero tú me has escuchado?"

Con la guerra ya casi perdida, el Shinse decide retirarse al castillo de Osaka, donde está Kondou y donde pueden organizarse de nuevo para volver al ataque. Como siempre, yendo de camino al castillo con nuestro chico nos sale Kazama al paso. Cuando parece que está a punto de dejarnos viudas, de detrás de un arbusto aparece la princesa Sen, que parece ser tiene un rango superior al de Kazama, lo que le permite echarle una buena bronca y conseguir espantarlo. Tras el altercado, seguimos nuestro camino y llegamos al castillo, donde nos ponen un poco en situación.
Como siempre, tenemos que abandonar Osaka en barco dirección a Edo, donde las fuerzas fieles al Shogun deciden reagruparse. En el viaje, Heisuke nos confiesa que ahora que está muerto para todos y no es más que un Rasetsu le importa un comino la política, el Shogun, y Japón, y que su única prioridad es proteger a la prota y estar a su lado. Y mientras yo lloro como una imbécil así se acaba la primera parte de la ruta.

EDO BLOSOMS

Lo primero que nos ocurre en Edo es que Sanan-san nos asalta y nos coacciona para que vayamos a nuestra antigua casa a buscar info sobre el Ochimizu. Por suerte Heisuke aparece por ahí y se une a la comitiva, para no dejarnos solas con el demente  Sanan. Allí, buscando entre los papeles, Heisuke nos admite que no confía mucho en Sanan y sus intenciones, pero tampoco podemos hablar mucho más porque de la nada aparece la princesa Sen. La muchacha nos cuenta cosillas sobre el Ochimizu agarraos que vienen curvas: resulta que, la idea que se tenía hasta ahora de que el Ochimizu permitía crear falsos Onis, "Rasetsus", era una idea errónea. Los Rasetsus no son "onis defectusos"; el ochimizu está hecho con sangre de una raza de "Oni" francés occidental, que tiene otras características diferentes a los Onis japoneses; entre ellas, beber sangre. Lo que viene a ser, un vampiro de toda la vida. Así que los Rasetsus no se alimentan de sangre porque sean defectuosos, sino porque en realidad son eso, vampiros y no Onis.
Un misterio menos en el mundo.
Sanan-san, que no necesita haberse leído Crepúsculo para atar cabos, llega a la acertada conclusión de que si un Rasetsu es un vampiro por haber bebido sangre de vampiro, si alguien bebe sangre de Rasetsu se convertirá en Rasetsu también. Sen le dice que no se emocione con sus teorías de sabio loco, ya que los Rasetsus no dejan de ser vampiros con cuerpo humano y por tanto el cuerpo no puede soportar el poder y demás cosas que conlleva ser Rasetsu, razón por la cual acaban o volviéndose locos o muriendo antes, ya que consumen más rápido su vida.
En fin, esta declaración no le gusta a nadie, ni siquiera a Sanan, que se vuelve al cuartel dejándonos con Heisuke un ratito a solas, al cabo del cual sufre una crisis de Rasetsu.
Pasan los días y el Shinsengumi cambia de estilo y empieza a usar uniformes estilo occidental, y podemos presenciar un interesante diálogo de Heisuke quejándose porque le han hecho cortarse la coleta. No obstante, pasamos a cosas serias cuando Hijikata se marcha con toda la tropa al frente y nos deja a cargo del nuevo cuartel y de Sanan-san, del que se sospecha que se la ido la pinza y sale de  noche a matar civiles para beber su sangre. Efectivamente, no Sanan pero sí otros Rasetsus del Shinse se escapan para asesinar a gente random, así que en compañía de Heisuke los seguimos y el muchacho decide que debe matarlos. Duda sin embargo, y en ese momento aparece Kazama, hace el trabajo sucio, y tras insultar al Shinsengumi en general y a Heisuke en particular, se va por donde ha venido.
Con las pruebas sobre la mesa, Heisuke y la prota comienzan a vigilar más de cerca a Sanan-san, con cero disimulo, de forma que el señor ya se huele lo que está pasando, pero les sigue la corriente y finge ser Inocente y Puro.
La batalla termina mal, como siempre y de vuelta al cuartel Harada y Shinpachi deciden que renuncian y dejan el Shinsengumi, e intentan convencer a Heisuke de irse con ellos, sin éxito. Más tarde el chico nos explica que No puede irse porque tiene a ALGUIEN especial a quien proteger. Ajá, misterioso.
En fin, poco después de la partida de los chicos, salimos a la ciudad a hacer unos recados con nuestro muchacho cuando éste ve a Ibuki, el chico que estaba con el Shinse antes de que llegase la prota, y tiene un momento de angustia existencial al darse cuenta de que él para todos está muerto y que de todas formas, ahora que es Rasetsu nunca podrá tener una vida normal y hogareña. La prota lo consuela como bien puede y regresan al cuartel. Poco después, en plena noche, la muchacha ninja que acompaña a Sen viene a buscarnos porque está preocupada por la princesa, que había recibido una presunta carta nuestra y no había vuelto a aparecer. Obviamente nosotras no le habíamos enviado nada, sino que, efectivamente, ha sido nuestro querido Sanan. Buscamos a Sen sin éxito, y cuando regresamos al cuartel nos encontramos con Sanan-san metiéndole la lengua hasta la garganta a la pobre muchacha. El presunto violador bueno de Sanan haciendo gala de su demencia nos explica que a descubierto que si le da su sangre a alguien, esa persona no solo se transforma en Rasetsu sino que además obedece sus órdenes.
Así mismo, nos explica que le ha dado su sangre (a la fuerza) a Sen porque...bueno mira, que os lo explique él.

madre mía como está el patio.

Aquí a nuestro amigo se le va la pinza y todo el tendedero, y empieza a divagar sobre que va a crear una raza de Rasetsus, UN IMPERIO, que acabará con humanos y Onis y patatínPatatán. Intentamos luchar contra él y salvar a Sen, pero no logramos ni lo uno ni lo otro, y Sanan se va con la princesa como rehén y sus Rasetsus.
Poco después Hijikata nos hace llamar para informarnos de que ha recibido una carta de una coalición pro-shogun firmada por una serie de territorios y personalidades importantes de otros feudos, y entre las firmas aparece la de Sanan-san. Le pide pues a Heisuke que vaya hasta Sendai a frenar a ese loco, y por consiguiente nuestra prota se apunta a la excursión. Cuando se lo vamos a contar a Heisuke, el chaval tiene un momento de pánico y pesimismo en el que nos dice que estamos locas y que él va a morir con total seguridad en ese encuentro con Sanan. Como la prota ve que se está poniendo muy intensito, le pega un señor tortazo, cura de todos los males.

Después de dejarle las cosas claras y decirle que nos vamos con él quiera o no, partimos rumbo a Sendai. En el bosque, lugar muy concurrido en el siglo XIX, nos topamos con Kazama, al cual ponemos al corriente de la situación sobre Sanan y los Rasetsus, y como recordemos este señor siempre había tenido especial interés por matarlos, se une a nuestra misión. Más o menos. Ya sabéis cómo es Kazama; en realidad tolera nuestra presencia y nos cuenta un par de cosillas interesantes, pero se va por su cuenta a Sendai. También aparece la ninja asistenta de Sen, Kimigiku, que tras informarnos decide continuar por su lado. A Kazama nos lo encontramos de nuevo al llegar a Sendai, donde vivimos un momentito de relax consistente en ver cómo Heisuke y él se intercambian puyas y golpes bajos como si fuesen niños de 6 años.
Tras esto nos vamos al pueblo, que parece un pueblo fantasma porque no hay ni un alma y lo único que nos encontramos son a un par de Rasetsus de los que huimos a toda pastilla. Refugiados ya en una casa ajena y vacía, Heisuke tiene otra crisis física seguida de una crisis existencial, y finalmente acaba confesándole a la prota que no puede vivir sin ella y que no quiere separarse de ella nunca. Nos ponemos bucólicos y hay beso aunque la prota es tan negativa como yo o más y se pone a pensar cosas tipo "hay que aprovechar el momento que seguramente muramos mañana".

Ya preparados para morir, nos vamos al castillo a buscar a Sanan-san, pero oh sorpresa, Sanan-san no está en el castillo, sino en el bosque como todo el mundo. El señor tiene un acceso de locura y grandeza en el cual nos echa la culpa (?) por "corromper" a Heisuke, alias no dejar que se le vaya la pinza como a él, y justo cuando vamos a ponernos con las manos en la masa, una conmoción en el castillo hace que Sanan-san tenga que posponer sus planes de asesinarnos. Sin mucha ceremonia se va al castillo, así que lo seguimos, nos encontramos con Kimigiku y nos colamos.
Dentro nos encontramos también con Kazama, que se une a la comitiva festiva para matar a Sanan. Cuando lo encontramos nos hace una demostración de sus delirios de grandeza, así que nos ponemos manos a la obra, alias, matarlo. No obstante, el hecho de contar con 2 Onis + Heisuke, cosa que podría ser, no sé, una ventaja, acaba resultando un verdadero Show en el que tenemos que vigilar que no nos maten a Kazama, a Kimigiku y a Heisuke. Finalmente nuestro niño consigue vencer y matar a Sanan-san él solito, tras lo cual intercambian el Típico Diálogo de Redención en el que de pronto Sanan-san recupera la cordura y Heisuke le perdona sus errores y enaltece su figura qué poco rencorosa es la gente, yo le habría escupido y me hubiese ido. Que se pudra en el infierno por amargarme la ruta.
Una vez acabado todo, comprobamos que Heisuke y los demás están bien, y Kazama, en un derroche de simpatía sin precedentes, nos comenta que existe un manantial sagrado en la aldea Yukimura cuya agua cura el Ochimizu  DIOS BENDITO GRACIAS AL CIELO. Así que nos despedimos de nuestros amigos Onis y volvemos para informar a Hijikata de que no hemos muerto pero Sanan-san sí. De paso, Heisuke le dice que deja el Shinsengumi ya que su prioridad ahora es encontrar el manantial. Hiji parece un poco mosqueado al principio, pero rápidamente le da el visto bueno a los tortolitos, que pasan esa noche en el cuartel diciéndose que se aman estoy llorando a lágrima viva  para continuar con su periplo. Sin embargo, antes de que puedan irse, Hijikata, Saito y Shimada les esperan para despedirse.

En el epílogo, nos encontramos todavía en la aldea Yukimura, donde Heisuke ha ido curándose poco a poco del Ochimizu y ya no queda rastro de Rasetsu en él. Su vida ahora se basa en estar juntitos y aislados ahí en el campo, durmiendo en la hierba y tomando el sol llorando estoy. La prota se queda un poco adormilada por el solecito y sueña con el pasado, y al despertar se lo cuenta a Heisuke, que le dice que estará siempre con ella, e incluso que cuando muera, su corazón seguirá a su lado. LLanto desconsolado y gritos.
Y se acaba la ruta.

 

En fin, esto es todo~ Espero que os haya gustado la entrada y espero poder ir trayendo esporádicamente el resto de rutas, por si no habéis jugado el juego y tenéis curiosidad o por si simplemente os va el drama.

See you~~ 

Hakuoki KW/EB: Ruta Hijikata

 

Hi!!
Quizá parecía que se me había olvidado PERO NO.

El Mal nunca descansa.

Y la obsesión latente que tengo con el Hakuouki desde hace ya casi 10 años, tampoco.

Así pues, comienzo, como había prometido, a reseñar ruta a ruta todas las rutas de los juegos Hakuouki Kyoto Winds y Edo Blossoms, que como había explicado, forman la parte I y II de una historia completa.

Si tenéis dudas o curiosidad, aquí os dejo:

- La Reseña Global del Juego: Hakuouki Kyoto Winds y Edo Blossoms

 -La reseña global del anime: Hakuouki Anime (porque tiene anime!).

-La lista de juegos de Hakuouki: Juegos Hakuouki

Como esta es la primera entrada, todavía no sé como organizaré las cosas, pero a medida que vaya subiendo rutas, os dejaré al principio los links del resto de entradas hasta la fecha. Para empezar, he elegido la ruta de Hijikata, que para algo es el Comandante, el chico principal y en general, el centro de este juego.  

En fin, lo que aquí veréis será una reseña/narración de su ruta junto con algunas de las CG's y en general, SPOILERS tanto de la ruta como de la trama del juego y del anime que viene a ser lo mismo. Avisados estáis. En esta entrada, al ser la primera, me explayaré un poco más y será algo más larga que el resto; en parte también porque la ruta de Hijikata es la que sigue más fielmente la historia real. Y así de paso ya os pongo en antecedentes para el resto de rutas y no me repito mucho.

RUTA HIJIKATA: KYOTO WINDS

Empecemos pues con la ruta de Hijikata: como he repetido y repetiré hasta la saciedad, este primer juego corresponde a la temporada 1 del anime y es bastante común para todos pues se centra en la historia "real".

El prólogo es el que ya nos conocemos: nuestra prota llega a Kyoto en busca de pistas sobre su padre y de la nada la atacan unos samuráis de pelo blanco y ojos rojos sedientos de sangre, que más tarde descubriremos que se llaman Rasetsus. La chica ve como Hijikata, Okita y Saitou se los cargan de manera eficiente, y al ser ella una testigo del percal, se la llevan al cuartel. Allí la dejan maniatada en una habitación hasta que al día siguiente la interrogan para decidir qué hacer con ella; cuando descubren que es una chica y más aún, que es la hija de Kodo Yukimura, al que también buscan, concluyen que matarla estaría un poquito mal, así que la chica pasa a ser una especie de invitada/rehén. Comienza a hacer vida en el cuartel aunque apenas la dejan salir de la habitación; la muchacha se aburre encerrada así que se va a quejarse un poco a Hiji, con la opción de insistirle para que al menos nos mande a fregar o simplemente quedarnos calladitas. Tenemos nuestro primer encontronazo con Takeda, un fabius de pelo largo (nuevo personaje en esta versión del juego).

Pasa el tiempo y el Shisengumi se topa con alguien parecido al padre de la muchacha, por lo que se le permite a esta salir de patrulla con los generales para ver si ve a su padre entre el gentío. Okita el amor de mi vida  le recuerda a Hijikata que a ojos de todo el mundo somos su paje así que deberíamos actuar como tal y no irnos por ahí de faranduleo; nos dan la opción de elegir que hacer, así que nos pegamos a Hijikata como un chicle a una alpargata, cosa que le resta años de vida y de paciencia al señor.

Hiji se deshace de nosotras a la primera de cambio, dejándonos en una tetería para que preguntemos por nuestro padre  pese a que hasta hacía 10 minutos no nos dejaba ni comer solas y quiere la suerte que poco después aparezca por ahí Takeda, así que podemos contemplar como el chaval extorsiona al dueño del local porque como sospechaba, no es trigo limpio. La prota se envalentona y está apunto de cometer una locura cuando de las sombras sale Iba Hachiro e interviene, pero como no es su ruta, no hablaremos de ello.

Tras el incidente, Hiji viene a buscarnos y sin perder un minuto nos chivamos de Takeda como debe ser.

La gente del Chosu comienza a moverse y confabular así que Hijikata nos informa que la cosa se está volviendo peligrosa y lo que nos queda y que la prioridad ahora es investigar a esa gente, así que se nos acaba lo de salir de paseo. Llega el momentazo de la redada de Ikedaya: al Shinse le llega información sobre una reunión de Chosu pero no tienen claro el lugar, así que Hiji y unos cuantos van al lugar que sospechan será el acertado, mientras que Kondo y el resto se dejan caer por Ikedaya ya que suele ser un punto de encuentro del enemigo. Nos quedamos en el cuartel hasta que se nos necesita como mensajero para avisar a Hijikata de que la reunión es en Ikedaya, por lo que corremos por nuestra vida y entregamos el mensaje. Tras esto, podemos ir a ver la refriega o simplemente seguir a Hijikata en su labor de pedir refuerzos, cosa que hacemos porque para algo es su ruta. Descubrimos que su objetivo no es pedir refuerzos sino más bien plantarse en medio del camino de los citados refuerzos y decirles que el Shinse ha llegado primero así que se pueden ir porque EllosLoHanVistoPrimero. Así que nos quedamos ahí, como un cono de tráfico toda la noche, para que la peña no le robe el protagonismo ni el mérito al Shinsegumi en la redada.

Tras unos días de paz y tranquilidad el Shinsegumi vuelve a tener trabajo y podemos ir con ellos o ser formales y quedarnos en el cuartel. Como somos fieles seguidoras de Hiji nos vamos tras ellos: se trata de una batalla en la que el Shinse es requerido como refuerzo pero cuando llegan no les dejan pasar y los echan de mala manera así que se pasan el día de un lado para el otro siendo despreciados por sus propios aliados. Al final Hijikata se cansa de esperar y de no estar poniendo su vida en riesgo así que se cuelan en la batalla por cuenta propia. Sus aliados, el clan Aizu, ya habían dado buena cuenta de la batalla cuando llegamos, pero los chicos quieren un poco de acción así que deciden ir tras los restos de la batalla para no volver a casa de vacío. Nos dejan elegir a quién acompañar así que vamos tras Hijikata y tenemos nuestro primer encuentro con Kazama, que empieza siendo bastante verbal cosa que no durará mucho.

Pasa el tiempo, Heisuke se trae a Itou-san y a más peña que no se lleva muy bien con el resto del cuartel, y tiene lugar el pequeñísimo incidente consistente en Sanan-san convirtiéndose voluntariamente en Rasetsu para así curar su brazo inútil. Spoiler: sale mal. Como hemos visto u oído lo que no debemos, nos cuentan por fin todo el asunto del ochimizu y los rasestsus: el padre de la chica había creado el primero con el fin de obtener guerreros indestructibles y poderosos que sin embargo le han salido defectuosos y pierden la cabeza debido a su sed de sangre. En fin, Sanan no la palma y se convierte en Rasetsu así que la vida sigue su curso, pese a que para Itou y el resto de gente que no son los protas, se le da por muerto.

Poco después el Shinse se muda a un cuartel más grande y les encargan vigilar el castillo en el que se hospedará el Shogun. Todo parece tranquilito hasta que Kazama y su crew deciden hacer acto de presencia, esta vez para contarnos que somos Oni como ellos y por tanto que nos van a secuestrar, nos guste o no. Rápidamente aparecen nuestros chicos al rescate y Yamazaki nos dice que va a ayudarnos a huir, pero en nuestra mente solo tenemos un objetivo: arañar el amor de Hijikata a fuerza de pegarnos a él, así que nos quedamos quietecitas en mitad del peligro. Hiji y Kazama tienen su segunda refriega pero los onis se cansan rápido de jugar a las batallitas y se van sin mayor problema pero dejando a la prota confusa y asustada. 

Tras esto el Shinsengumi se muda finalmente a un alojamiento mayor y todo es calma hasta que Kazama viene a romper nuestra tan preciada tranquilidad otra vez mientras estamos barriendo el patio curioso que a mí no me venga a secuestrar ningún maromo mientras barro la cocina. Rápidamente Hijikata, Harada y Heisuke vienen a nuestro auxilio, pero Kazama esta vez ha venido solo a reírse un ratito de la gente y a decirles que dejen de jugar con el Ochimizu. 

Pasa el tiempo y patrullando por las calles conocemos a Sen, que se vuelve nuestra amiga. También entran en escena Souma y Nomura, dos pimpollos de la edad de la prota a la que tienen como senpai y Souma tiene ruta. En fin, a Harada le encargan vigilar un cartel muy importante y con el dinero del trabajo nos invita a todos a Shimabara a beber y comer como si no hubiese mañana, así que en cierto momento tenemos la oportunidad de ausentarnos y hablar un ratito a solas con Hijikata mientras el resto se beben todo el sake de Japón. 

Una buena noche un rasetsu se descontrola, y de todas las habitaciones va a parar a la nuestra y nos ataca. Nos salvamos porque Hijikata y compañía deben de tener el sueño bastante ligero, así que oyen la conmoción y vienen a nuestro rescate. No obstante tanto ruido y drama despierta a Itou que se topa de bruces con Sanan, al que creía muerto, y monta un buen revuelo. Todo esto desemboca en que Itou decide dejar el Shinse y llevarse consigo a sus hombres para pena de nadie aunque entre ellos se lleva también a Heisuke y Saitou, para lamento general. 

Poco después, una noche cualquiera, nuestra amiga Sen aparece por el cuartel diciendo que es una Oni como Kazama, que sabe que al chaval se le ha metido entre ceja y ceja secuestrarnos y que allí, por muy buenos que sean los chicos del Shinse, no estamos a salvo así que deberíamos irnos con ellas. Todo este discurso ofende y envalentona a los chavales, que de pronto se creen capaces de luchar contra mil Kazamas y aunque llevan renegando de nosotras todo el juego, de pronto deciden que nos quieren proteger Porque Pueden. Kondo intenta poner orden y dice que la decisión la debe tomar la prota, no la testosterona reinante, así que nos dan tiempo para reflexionar. Como nuestra salud e integridad nos importa bastante menos que el echo de estar pegaditas a nuestro mozo de turno, osease, Hijikata, declinamos la oferta y decidimos quedarnos. Sen lo entiende a la perfección las prioridades claras y se va, confiando en que estemos a salvo con los chicos. Aproximadamente diez segundos después aparecen Kazama y sus colegas para secuestrarnos estaban escondidos tras un arbusto esperando a que Sen se fuese porque le tienen miedito.

Aunque, como siempre, nos dicen que nos quedemos en la habitación, decidimos ir al patio a ver qué se cuece de forma que Kazama nos echa el guante, pero Hiji viene a nuestro rescate. Kazama y sus amigos ven que no van a lograr nada y tras insultarnos un poquito, se van por donde han venido.

En fin, tras el incidente los monjes echan al Shinse del templo donde habían instalado su cuartel a la fuerza por lo que nos mudamos a un nuevo emplazamiento. Allí tenemos un momentito de paz y tranquilidad en el que nos topamos con Hijikata trabajando con su melena al viento y nos ofrecemos a peinarle, pero declina la oferta y nos despacha diciendo que le hagamos la comida. Eso sí, con un nivel de amabilidad nunca antes visto, lo que indica que vamos por buen camino.

Pasa el tiempo y llega el Incidente de AburaKoji según el cual deciden que hay que matar a Itou y a su grupito porque están confabulando contra ellos, así que tienen que ser los más rápidos del oeste y atacar primero. Decidimos ayudar a matar a Itou, que es un trabajo bastante sucio ya que nuestra labor es emborracharlo para que lo asesinen después más fácilmente, pero es un precio que hay que pagar para poder pegarnos a Hijikata un poquito más.

Photos taken seconds before Disaster

En fin, tras cargarse a Itou y dejar a Heisuke casi en el otro barrio y por tanto deber convertirlo en Rasetsu, la vida sigue su ya algo turbulento curso. 

A Kondo-san le pegan un tiro en el hombro lo que hace saltar las alarmas y alienta a Sanan-san a repartir entre los muchachos botellitas de Ochimizu para que en lugar de morirse en paz, puedan convertirse en Dichosos Rasetsus y mutar como él. Relacionado con esto poco después aparece por el nuevo cuartel Sen, esta vez para echarles un sermón sobre lo Mal que está que anden creando más Rasetsus cuando se ve que es una situación insostenible y que solo transforman a personas en monstruos. Obviamente en el Shinse no suelen tomarse muy bien las críticas constructivas así que Hijikata se pone a la defensiva hasta que le comentan que los rasetsus de Sanan se van por ahí de noche a matar gente. Esto le causa a Hiji la que imagino será ya su tercera úlcera, que viene rápidamente acompañada por una cuarta cuando Sen insiste de nuevo en que nos vayamos con ella y dejemos el Shinsengumi porque la guerra estallará en un par de días y no podrán con todo. La prota duda entre irse o no, porque sabe que lo lógico es irse pero tenemos otros intereses mayores llamados Amor e Hijikata tampoco parece por la labor de dejarla marchar, así que con muchos malabares se marca un discurso según el cual lo lógico es que nos quedemos spoiler, no, pero en su cabeza suena espectacular. La prota se queda muy tranquila pensando que su decisión de permanecer ahí es por lealtad y camaradería, pero Sen se huele ya la tostada y nos suelta un "Ajám, así que te gusta Hijikata" y a  nuestra muchacha se le viene el mundo encima porque no se había ni dado cuenta.

Come niña, que estás creciendo.

La tuberculosis de Okita aflora y se lo llevan a Osaka donde ya estaba Kondo; por otro lado estalla la guerra contra Chosu-Satsuma, que pese a tener la mitad de hombres que el bando del Shinse, lo que tienen son cañones y escopetas que les dan cierta ventaja sobre nuestro KatanaTeam. Tras bombardear y prender fuego al cuartel, el Shinse debe retirarse y buscar refuerzos y un nuevo emplazamiento. Nos vamos con Inoue a pedir refuerzos pero nos reciben bastante mal, así que nos retiramos pero nos topamos con Kazama en el proceso. Inoue se sacrifica heroicamente para entretener al chaval y que podamos huir, pero nos quedamos en shock y no lo hacemos, así que tiene que venir Hijikata a buscarnos. Comienza la primera pelea seria contra Kazama en la que nuestro chico tiene todas las de perder, por lo que se bebe el Ochimizu sin dudarlo y se transforma en un rasetsu, dándole problemas a Kazama hasta que este se cansa de jugar. Por suerte para nosotros por desgracia para Yamazaki aparece Yamazaki y al ver que se van a cagar a Hijikata se interpone en la contienda y recibe él el ataque mortal venga, más muertos en nuestra conciencia, vaya tardecita. Poco después aparecen Shinpachi y compañía, además de Amagiri que se lleva a la fuerza a Kazama, cosa que nos salva la vida. Atendemos de urgencia a Yamazaki y entre todos nos lo llevamos al castillo de Osaka, donde Hijikata se recupera del golpe psicológico recibido y mira a la vida con renovadas esperanzas. Esperanzas que le duran unos 10 segundos porque vienen a informarnos de que el shogun ha huido en barco a Edo y que por tanto no tiene mucho sentido seguir luchando allí. Hiji se cabrea, se lía a patadas con un árbol y tras recuperar la compostura, monta a todos sus soldados en unos barcos y nos vamos todos de excursión forzada a Edo. En el trayecto Yamazaki muere definitivamente y le hacen un entierro marinero; tras esto tenemos una pequeña charla con Hijikata en cubierta donde nos dice que sabe que ganarán la guerra y que no está todo perdido. Me siento mal por reírme, pero me río.

Y aquí finaliza la ruta de Kyoto Winds.

EDO BLOSSOMS.

Empezamos el juego ya en Edo, donde Kondo-san sigue convaleciente e Hijikata tiene que hacerse cargo de todo. El muchacho está exhausto y se le nota, y encima Heisuke nos habla de la sed de sangre que atenaza a los Rasetsus y que resulta ser un dolor insoportable, por lo que la prota se preocupa aun más por Hijikata pero no por el resto de peña sufriendo, porque claro, no es su ruta y decide ir a su antigua casa a ver si encuentra algo entre los libros de su padre. Milagrosamente nos topamos con las instrucciones para hacer la medicina que sirve un poco de placebo ante la sed de sangre, y al volver se la ofrecemos a Sanan y Heisuke, aunque el primero la rechaza airado porque Él Controla viejo loco. Vamos a buscar a Hiji y nos lo encontramos teniendo su primer ataquito de rasetsu, así pues podemos darle la medicina, darle sangre o dejar que se aguante.

En fin, Kondo-san se recupera y les consigue uniformes occidentales y una nueva batalla para que no se aburran: se van a defender el castillo de Kofu por órdenes del Shogun, aunque Hiji ya sospecha que tienen pocas posibilidades. La situación da un giro gracioso cuando, de camino al castillo, se enteran de que ya lo han conquistado los enemigos te tienes que reír. A Kondo-san esto le repatea un poco y decide ir igual a luchar aunque ya hayan perdido, haciendo que la mitad del ejército deserte y que a Hijikata ya le esté dando su, calculo, décima úlcera. La cosa se pone fea no se podía saber y Hiji nos hace jurar que escaparemos con Kondo-san para protegerlo PERO que no nos dejaremos matar hay que empezar a bajar ese nivel de exigencia. En nuestra huida nos topamos con Amagiri que nos dice que, sintiéndolo mucho, nos tiene que matar. Kondo-san intenta protegernos, luego intentamos defendernos nosotras y finalmente cuando ya creía que esto era un bad ending aparece Hijikata a salvar el día. Tras luchar y dialogar con Amagiri, el oni ve que tenemos razones nobles para vivir y por tanto se disculpa y se va por donde ha venido. Antes nos cuenta que cada vez que un Rasetsu usa sus poderes, su vida se acorta. No vaya a ser que seamos felices.

Pasa el tiempo, Harada y Shinpachi dejan el Shinse, e Hijikata le pide a Sanan-san que deje de usar a los Rasetsus y eso le sienta un poco mal al citado señor. La vida transcurre sin mucha acción por nuestra parte, y seguimos cambiando de cuartel. Estando un día en un nuevo emplazamiento viviendo tranquilamente nuestra vida, de la nada rodean el edificio y hay que huir. Kondo-san sin embargo ya es la apatía en persona y decide entregarse con un nombre falso, confiando en que no lo reconocerán y lo dejarán marcharse jajajajajajajajajajajaja. Hiji sabe que es un plan suicida así que se enfada mucho, grita muy fuerte, y patalea un poco, pero Kondo-san es más terco que una mula y le juega la carta de "Aquí mando Yo y te ordeno que te largues" así que nos largamos sin él, con Hijikata muy enfadado con la vida.

Este señor está ya muy cansado y todavía faltan por morirse la mitad del cast.

Tras todo el drama volvemos a refugiarnos a Edo, donde nos acoge Okita, que sigue enfermo pero eso no le ha impedido ponerse el uniforme y querer dar guerra. Mi pobre niño el chico nos pregunta por Kondo-san e Hijikata le miente con descaro porque sabe que cuando sepa la verdad se lo tomará muy mal y no queremos estar ahí para ver eso. Tras esto, Hiji nos abandona y se va con Souma a incordiar a los altos cargos y pedir la liberación de Kondo, pero la jugada les sale mal como será costumbre y solo logran que encarcelen a Souma. De camino a su próxima guerra Hijikata tiene una crisis de conciencia sobre sus acciones pasadas y su futuro incierto, y nos vuelve a dejar caer que no pintamos mucho allí pero que mientras no molestemos que hagamos lo que queramos.

En fin, de camino al norte o a donde quiera que vayamos, se enteran de que otros aliados suyos se han rendido así que al muchacho se le mete entre ceja y ceja que hay que asediar un castillo para demostrar su fuerza y poder spoiler, saldrá mal seguramente. A Otori, un muchachito que dirige ahora las tropas, aquello le parece una locura, pero Hiji es más terco que una mula y ahí que se va a guerrear. Algunos soldados intentar desertar en plena acción pero ya se encarga nuestro chico de matarlos él y les deja claro a los demás que las opciones son Morir o Morir, así que ya pueden poner empeño en que sea conquistando el castillo. Para mi genuina sorpresa logran tomar el castillo para toparse con que en él estaba Kazama de vacaciones. Tienen otro duelo a muerte del que Hijkata no habría salido con vida si no fuese porque los anteriores dueños del castillo le prenden fuego al edificio para robarnos nuestra única victoria. Kazama se larga airado, dejando al chico vivo de milagro, y Amagiri aparece para preguntarle a Hiji que por qué demonios sigue luchando si sabe que la guerra está perdida y que el shogun les traicionó esa pregunta también me la hago yo, amigo mío. Hiji le responde que el deber de un samurái es luchar por su señor pase lo que pase.

En fin, nos salvamos por los pelos de morir chamuscados e Hijikata se pasa unos días con un pie en la tumba hasta que se recupera finalmente y de paso gana un poquito en amabilidad y deja de escupirnos veneno cuando le hablamos, y también se disculpa con todo aquel que viene a gritarle señal de que no se encuentra en pleno uso de sus facultades.

Después de este episodio, lo que queda del Shinse sigue avanzando hacia el norte y nos reagrupamos con Saitou, Souma y Nomura, que de paso nos comentan que Kondo-san ya ha sido ejecutado. 

 Pronto empieza a haber problemas por varios frentes, por lo que lo que queda del Shinse vuelve a dividirse y nosotros nos vamos con Hijikata a Sendai, a donde primero había enviado a Sanan-san y Heisuke en representación, para asegurar ese frente. Al llegar no hay ni rastro de Sanan y sus rasetsus y encima nos comentan que está habiendo muchos asesinatos nocturnos. Hijikata suspira y decide que se encargará de investigarlo, pero poco después aparece Heisuke y nos resume la situación en que Sendai ya no es tan aliado nuestro como se creía, el padre de la chica está allí y  Sanan-san se ha visto con él en secretito aquí huele a traición. Mientras nos cuenta todo esto, aparece el padre de la chica con sus rasetsus y tras noquear a Heisuke, nos secuestra y nos lleva al castillo de Sendai donde nos esperaba Sanan-san. Cuando despertamos nos dan a entender que Heisuke la ha palmado, pero el chico es más duro que una piedra y encima se ha ido a chivar a Hijikata, así que ambos hacen una entrada triunfal en el castillo para rescatarnos. El drama se ve interrumpido por una pequeña charla política y le ofrecen su ayuda y su nuevo ejército de rasetsus a Hijikata, pero el chico sabe que están como cabras y la rechaza amablemente. ENTONCES, para sorpresa de TODOS, Sanan dice "pues si no lo quieres tú entonces no lo necesitamos para nada" y se pone a matar a sus propios Rasetsus qué está pasando aquí?????

 Resulta que Sanan había ido de farol todo este tiempo para acercarse a Kodo y acabar con los rasetsus porque por fin había entendido que seguir experimentando con ellos era un error maravillosa jugada. Así pues Hiji, Heisuke y Sanan se ponen a matar rasetsus y en el fragor de la batalla uno nos ataca a nosotras pero Kodo aka nuestro padre nos defiende. Tras pedirnos perdón y arrepentirse de sus pecados, el señor se muere; las desgracias no acaban aquí porque, debido a toda la energía usada, Heisuke y Sanan mueren también.

Pasa el tiempo y se empieza ya a hablar de poner rumbo a Ezo porque se están quedando sin aliados. Nos informan que Saitou ha muerto también una mentira como la copa de un pino pero de acuerdo y los cuatro gatos que quedan, Nomura, Souma y Shimada, se empeñan en acompañar a Hiji al norte. Obviamente nosotras también pero a medio camino el chico nos dice que nos abandona en medio del bosque . Nos da un montón de razones perfectamente lógicas para que no vayamos con él, pero visto que ninguna nos vale, nos suelta un "yo no puedo hacerte feliz" que no es lo que me esperaba pero es LA PRIMERA muestra de afecto que veo en esta ruta, y vamos ya en el capítulo 4 de 5. Justo cuando yo creía que pasaría algo bonito la vida te da sorpresas e Hijikata nos dice que no podemos ir con él y Procede a Abandonaros En Mitad del Bosque.

Qué está pasando.

Otori ve todo el drama y nos dice que no nos preocupemos que ya mandará que nos busquen una vez se hayan establecido en Ezo, así que pasan 3 meses y nos plantamos allí en contra de la voluntad de Hijikata, para descubrir que ya han comenzado con ese delirio llamado Crear la República de Ezo. Hiji obviamente no sabía nada de eso y se enfada un poco y nos grita otro tanto pero la chica no tiene tiempo para tonterías y le devuelve los gritos, haciendo que el chico se calme un poco, se rinda y admita que nos necesita y nos da un abrazo YA ERA HORA. La vida en la República de Ezo tiene su encanto y tranquilidad y podemos contemplar cómo nuestros aguerridos samurais marujean como señoras mayores. Otori da por hecho que Hijikata y la chica son ya Marido y Mujer e Hijikata no desmiente el hecho, ES MÁS, confirma que la prota es suya y que no va a dejar que nadie se la quite nos ha costado 2 juegos y 10 capítulos, pero lo hemos conseguido. Tras esto la cosa se pone seria, hablan de guerra e Hiji nos cuenta que la próxima batalla será para él la última vamos que planea palmarla. Tenemos aún algunos momentos de calma antes de que llegue la primavera, se deshiele la isla y comiencen las batallas, muriendo Nomura en la primera de ellas.

Vienen unos meses de tensa calma en los que Hiji intenta una y otra vez esta vez con cariño que nos vayamos para no morir allí con todos, pero somos fieles hasta el mismísimo final y ahí que nos quedamos a hacerle compañía. El día antes de la batalla nos confiesa POR FIN su amor y que, pese a que lleva queriendo morirse largo y tendido, ahora tiene una razón para vivir aka la prota.

La felicidad nos dura una noche porque al día siguiente pues estalla la guerra. Hijikata tiene que ir a pedir refuerzos al otro frente y nos vamos con él, a caballo, la peor decisión de su vida puesto que le pegan un tiro. El pobre hombre se queda al borde de la muerte y como estamos solos en medio del bosque, no nos queda otra que arrastrarlo lejos de ahí y rezar para que no se nos muera desangrado. La cosa pinta bastante mal y el muchacho tiene pinta de ir a palmarla de un momento a otro, así que la chica se hace una herida, le da un sorbito a su propia sangre y lo besa para que así la beba y se cure mediante sus poderes de Rasetsu. La trasfusión da resultado y logramos llegar a pie a nuestro destino, que es un campo de sakuras. Todo es muy bonito e idílico durante los siguientes 5 segundos, tras los cuales aparece Kazama para darle guerra a un pobre Hijikata que acaba de perder al menos un litro de sangre y que obviamente no está en condiciones para jugar con él. Kazama a su manera admite que se ha equivocado con todos los insultos y toda la mierda que le ha soltado a Hiji sobre ser un rasetsu y un falso Oni y le dice que le considera un igual, por lo que le otorga un nombre de Oni: Hakuouki, que viene a ser "demonio de la flor breve" en referencia a que al ser un Rasetsu es fuerte y poderoso pero su vida se acorta. En fin, se retan a un duelo porque puede que ahora sean amigotes pero lo primero es lo primero. Por suerte para nosotros, Hiji sale victorioso y mata a Kazama. Y la ruta se acaba aquí gracias a Dios se ha olvidado de que la guerra sigue pendiente porque yo no soportaría más drama.

Tras esto viene el prólogo en el que nos cuentan que, mientras nosotros estábamos matando Onis y viendo cerezos, el resto estaba en la guerra de la que nos libramos gracias al cielo y obviamente, perdieron. Nos hacen un pequeño resumen de qué ha sido del resto del shinse (Souma está en la cárcel, Shimada sobrevivió e Iba se suicidó) y vemos como la prota e Hijikata están, un año después, contemplando los cerezos. Sobre ellos acecha la incertidumbre de que Hijikata morirá pronto debido a que es un rasetsu, pero no saben cuando, así que intentan centrarse en lo positivo y en pasar tiempo juntos y ser felices.

Y aquí se acaba esta serie de catastróficas desdichas, aunque para mi sorpresa, he conseguido acabarla sin sacar ni un solo bad ending. 

 En fin, esto es todo~ Espero que os haya gustado la entrada me ha quedado horriblemente larga, lo siento y espero poder ir trayendo esporádicamente el resto de rutas, por si no habéis jugado el juego y tenéis curiosidad o por si simplemente os va el drama.

See you~~